Efectos del alcohol en nuestra salud

A lo largo de los años, el alcohol se ha convertido en una de las sustancias más comúnmente consumidas alrededor de todo el mundo.

Y es que, ya sea como acompañamiento de alimentos o para fines recreativos; las mayoría de los adultos lo ha ingerido en algún momento de su vida o lo hace con cierta frecuencia.

Sin embargo, el gran problema es que, a pesar de que su consumo se ha transformado en algo completamente habitual, este puede llegar a generar efectos negativos en nuestra salud. Y aún más relevante, no solo en quienes consumen grandes cantidades de esta sustancia, sino también, en lo que tendemos a catalogar como “consumo moderado a leve”.

La típica idea de que consumir solo una bebida alcohólica diaria no genera daños a nuestro cuerpo, es errónea, y es que aquella, de acuerdo a lo que destacan los científicos, es una dosis más que suficiente para producir una degeneración en el cerebro.

Lo mismo, para quienes no consumen alcohol durante la semana, pero beben el equivalente, por ejemplo, en fiestas de fin de semana.

Pero… ¿Cuáles son estos efectos que ocasiona el alcohol en nuestra salud?. Aquí te contamos algunos.

El consumo del alcohol genera un aumento en el cortisol, que es una hormona segregada desde la hipófisis en el cerebro, y que también es conocida como la “hormona del estrés”.

En el caso de las personas que beben regularmente, por ejemplo, dos a cuatro tragos los fines de semana, generan un aumento de esta hormona, lo que deriva en que posterior a haber bebido se sientan más estresadas.

Mientras se ingieren bebidas alcohólicas se ven interrumpidos los circuitos del estado del ánimo, lo que vuelve a las personas más hiperactivas. Sin embargo, después de un tiempo, la actividad de estos circuitos desciende, generando una afectación en el estado anímico de la persona.

Por la razón antes mencionada, es que para muchas personas aumenta la necesidad de continuar bebiendo, puesto que tienden a buscar el efecto previo a esa disminución en el estado de ánimo y los sentimientos de bienestar.

El consumo de alcohol genera consecuencias en nuestro cerebro, específicamente en el área del hipocampo, pequeño órgano que participa en el proceso de consolidación de algunos tipos de memoria.

Es por esto, que muchas personas, luego de haber bebido, pueden tener pequeñas lagunas que no recuerdan.

Sin embargo, si el consumo de alcohol se vuelve algo reiterado y en cantidades importantes, podría llegar a generar en un problema más grave, dañando al cerebro y afectado la memoria de manera permanente, tanto a medio como a largo plazo.

El principal componente de las bebidas alcohólicas es el etanol, que si bien está validado para ser consumido por el ser humano, en primera instancia, ingresa al cuerpo como una especie de “veneno”, que pasa por un proceso de conversión al interior de este.

Luego de haber pasado por dicha transformación, el etanol se convierte en cierta forma de calorías, a las que se les suele llamar “vacías”, principalmente porque todo este proceso de modificación del componente es metabólicamente muy costoso para el organismo y no cuenta con ningún valor nutritivo.

Estas calorías no aportan vitaminas, ni aminoácidos, ni ácidos grasos… son realmente calorías vacías.

Estos son solo algunos de los perjuicios que podría generar el consumo de bebidas alcohólicas en tu cuerpo, sin embargo, si eres deportista, debes tenerlo aún más presente, puesto que una ingesta constante de estas sustancias podría perjudicar tus metas, debido a que este tipo de bebidas tienden a ralentizan tu metabolismo.

Por esto, lo ideal es reducir el consumo de bebidas alcohólicas lo más posible, ya sea disminuyendo las cantidades que se beben en cada ocasión o distanciando en tiempo las instancias en las que se bebe.